LANCELOT-PIENNE

"Cuatro generaciones de viticultores franceses, vidas vividas entre la viña y la bodega, día tras día.
. La historia de Lancelot-Pienne se remonta a unos 120 años, cuando los miembros de la familia fundaron los cimientos de la maison en Cramant, en el corazón de la Côte des Blancs.
Estamos a principios del siglo XX y un jovencísimo Jean-Baptiste Lancelot se dedica a cultivar sus primeras hectáreas de viñedo en la campiña francesa; lo hace tan bien que unos años después le llaman para trabajar en una empresa muy respetable: ¡Mumm! Una pasión transmitida de padres a hijos, hasta el punto de que Jean Lancelot, a los veinte años, tras formarse en las más importantes casas de champán francesas, comenzó a elaborar él mismo sus primeras cuvées.
Fue después de la Segunda Guerra Mundial y a partir de entonces la escalada hacia el éxito fue vertiginosa, en 1967 Albert, el hijo de Jean, realizó un curso de derecho y de técnicas de vinificación, se casó con Brigitte Pienne, una rica dama de Champagne, también hija de viticultores de Champagne. De hecho, las tierras de ambas familias se unen para dar vida a la actual estructura de la empresa, con unas 8,3 hectáreas de propiedad repartidas entre la Côte des Blancs y el valle del Marne. El nombre de la Maison cambió y se convirtió en Lancelot-Pienne. Desde 2005, la gestión agronómica y enológica se confía a Gilles Lancelot, licenciado en enología por la Universidad de Reims y con una pasión innata por el trabajo en el pueblo. Los resultados son impresionantes: 70.000 botellas producidas cada año (40% para el mercado nacional francés, el 60% restante se exporta a todo el mundo: Benelux, Italia, Japón y California). Imposible, por tanto, dejarlo pasar, cualquier peregrino de las burbujas en su viaje de purificación enológica debe necesariamente detenerse aquí, le aseguramos la esencia del "santuario de Cramant" en la botella con champagnes únicos en términos de suavidad, redondez y cremosidad. "