GEOFFROY
Las raíces de la bodega Geoffroy se remontan al siglo XVII y están inextricablemente ligadas al pueblo de Cumières, situado en el corazón del Valle de la Marne. La familia Geoffroy lleva casi cuatro siglos cultivando uvas y elaborando vino en esta zona.
En tiempos más modernos, concretamente en 1950, Roger Geoffroy y su esposa Julienne iniciaron la producción moderna de Champagne. Su hijo, René, tomó las riendas de la bodega, dando un nuevo impulso con la compra de nuevas parcelas y desarrollando plenamente el concepto de récoltant-manipulant.
Hoy, Jean Baptiste, miembro de la nueva generación de la familia Geoffroy, está al frente de la empresa.
En las comunas de Damery, Hautvillers, Fleury la Rivière y Cumières se plantan aproximadamente catorce hectáreas de viñedos, para un mosaico de nada menos que 35 parcelas, algunas de las cuales están incluso clasificadas como Premier Cru.
Las tres cepas simbólicas de la denominación, pinot noir, chardonnay y pinot meunier, se cultivan en las hileras, con predominio de la primera. La filosofía de Geoffroy es sencilla: sólo las uvas sanas y maduras pueden producir burbujas perfectas, por lo que el objetivo es preservar el potencial de los suelos.
En la bodega, el espíritu de trabajo es de respeto, paciencia y extrema atención al detalle. Antes de la vendimia, las uvas individuales se prueban varias veces para planificar el momento perfecto de la recogida. Cada operación de vinificación se realiza por gravedad, para no estresar en exceso el mosto, un elemento "vivo" que debe alterarse lo menos posible.
Cada año, Geoffroy produce 120.000 botellas, repartidas en una decena de productos. "Expression", "Pureté", "Empreinte", "Volupté" y la cuvée "Rosé de Saignée" son algunas de las etiquetas más representativas de la gama de la bodega, perfectamente capaces de satisfacer las expectativas de los amantes del vino más exigentes.
En tiempos más modernos, concretamente en 1950, Roger Geoffroy y su esposa Julienne iniciaron la producción moderna de Champagne. Su hijo, René, tomó las riendas de la bodega, dando un nuevo impulso con la compra de nuevas parcelas y desarrollando plenamente el concepto de récoltant-manipulant.
Hoy, Jean Baptiste, miembro de la nueva generación de la familia Geoffroy, está al frente de la empresa.
En las comunas de Damery, Hautvillers, Fleury la Rivière y Cumières se plantan aproximadamente catorce hectáreas de viñedos, para un mosaico de nada menos que 35 parcelas, algunas de las cuales están incluso clasificadas como Premier Cru.
Las tres cepas simbólicas de la denominación, pinot noir, chardonnay y pinot meunier, se cultivan en las hileras, con predominio de la primera. La filosofía de Geoffroy es sencilla: sólo las uvas sanas y maduras pueden producir burbujas perfectas, por lo que el objetivo es preservar el potencial de los suelos.
En la bodega, el espíritu de trabajo es de respeto, paciencia y extrema atención al detalle. Antes de la vendimia, las uvas individuales se prueban varias veces para planificar el momento perfecto de la recogida. Cada operación de vinificación se realiza por gravedad, para no estresar en exceso el mosto, un elemento "vivo" que debe alterarse lo menos posible.
Cada año, Geoffroy produce 120.000 botellas, repartidas en una decena de productos. "Expression", "Pureté", "Empreinte", "Volupté" y la cuvée "Rosé de Saignée" son algunas de las etiquetas más representativas de la gama de la bodega, perfectamente capaces de satisfacer las expectativas de los amantes del vino más exigentes.
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