CLYNELISH
"La destilería de Clynelish se estableció en 1819 en las Highlands del Norte, en una zona antiguamente dedicada a la cría de ovejas. Cuando los terratenientes dejaron de ver la agricultura como una fuente de ingresos a largo plazo, decidieron destinar sus tierras a otras actividades más rentables, como la producción de whisky.
La estructura actual de Clynelish se debe a una reestructuración en 1968, tras el cierre de la antigua destilería; rebautizada como Brora y reabierta unos años más tarde, la antigua destilería se mantuvo en activo hasta 1983, cuando la gran crisis del whisky la cerró definitivamente: hoy en día Brora es considerada por los aficionados como un verdadero Single Malt de culto.
La destilería actual, que cuenta con alambiques construidos con la misma forma que los del antiguo Clynelish, se centra en las mezclas y es una de las que más contribuye a uno de los whiskies más conocidos del mundo: Johnnie Walker, propiedad de Diageo.
A menudo, cuando la gente piensa en whisky fino, piensa inmediatamente en Spyside e Islay, pero Clynelish nos demuestra que también se pueden encontrar productos finos en otras partes de Escocia; Cuando la destilería original de Clynelish fue construida a principios del siglo XIX por el futuro duque de Sutherland, el whisky que allí se producía era tan preciado que sólo podía destinarse a unos pocos particulares ilustres, y aún hoy, muchos años después, la producción de Clynelish es considerada por los expertos y entusiastas como de gran e indiscutible valor.
En el whisky Clynelish, siempre fresco y de cuerpo medio, casi se puede sentir el salado aire marítimo y, aunque no hay la punzante nota ahumada típica de los espirituosos de Islay, sigue siendo sorprendentemente intenso, con una estructura sólida y armoniosa, además de estar marcado por un dulzor penetrante y una huella salada nunca trivial. "
La estructura actual de Clynelish se debe a una reestructuración en 1968, tras el cierre de la antigua destilería; rebautizada como Brora y reabierta unos años más tarde, la antigua destilería se mantuvo en activo hasta 1983, cuando la gran crisis del whisky la cerró definitivamente: hoy en día Brora es considerada por los aficionados como un verdadero Single Malt de culto.
La destilería actual, que cuenta con alambiques construidos con la misma forma que los del antiguo Clynelish, se centra en las mezclas y es una de las que más contribuye a uno de los whiskies más conocidos del mundo: Johnnie Walker, propiedad de Diageo.
A menudo, cuando la gente piensa en whisky fino, piensa inmediatamente en Spyside e Islay, pero Clynelish nos demuestra que también se pueden encontrar productos finos en otras partes de Escocia; Cuando la destilería original de Clynelish fue construida a principios del siglo XIX por el futuro duque de Sutherland, el whisky que allí se producía era tan preciado que sólo podía destinarse a unos pocos particulares ilustres, y aún hoy, muchos años después, la producción de Clynelish es considerada por los expertos y entusiastas como de gran e indiscutible valor.
En el whisky Clynelish, siempre fresco y de cuerpo medio, casi se puede sentir el salado aire marítimo y, aunque no hay la punzante nota ahumada típica de los espirituosos de Islay, sigue siendo sorprendentemente intenso, con una estructura sólida y armoniosa, además de estar marcado por un dulzor penetrante y una huella salada nunca trivial. "
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