CARONI
La legendaria destilería Caroni dejó de funcionar en 2002, tras un largo periodo de producción que comenzó en Trinidad en 1918, dejando a Angostura como la única destilería activa en la isla. Las reservas de este magnífico ron se han convertido en algo especialmente buscado por los embotelladores independientes por su carácter rico y especiado, lo que ha dado lugar a una búsqueda del tesoro de barriles viejos.
Velier es uno de los mayores y más importantes actores del sector de la importación y distribución italiana. Se fundó en 1947 en Génova y se especializó inicialmente en la importación de licores. A continuación, el negocio se amplió a los vinos y, más tarde, comenzó la labor de selección de barriles de Whisky y Ron que luego se comercializaron con su propia marca.
Es Luca Gargano, que se incorporó a Velier en 1983, comprando una acción junto con su hermano Paolo, quien descubrió algunas de las últimas barricas producidas por Caroni. En octubre de 2004, Luca viajó al Caribe para visitar la sede de la histórica destilería en Trinidad. El panorama al que se enfrentó fue terrible: la empresa había caído en desuso y la refinería de azúcar con la destilería estatal adyacente habían sido cerradas. Al ver que se utilizaba un sistema de embotellado manual, muy artesanal, Luca preguntó si todavía tenían barricas en proceso de envejecimiento. Así que le condujeron a la puerta de un almacén que contenía cientos de barriles de ron, algunos de ellos de 1974, utilizados para cortar los rones más jóvenes.
Unos meses más tarde, algunas de esas barricas se enviaron a Italia para evaluar y analizar su calidad. Los rones eran excelentes y se decidió embotellarlos con toda su fuerza para mantener el equilibrio. Fue el comienzo de una nueva marca y de una línea de rones que conservan el aliento de una época que ya no existe. Son rones ricos en historia, aromas y olores que nunca más se producirán.
Así es como la antigua e histórica destilería Caroni, fundada en 1918 y que ya no funciona desde 1993, sigue viva hoy en día: en todas esas etiquetas que llevan el nombre de "Caroni", encontramos un trozo de historia, de lo que fue una destilería legendaria, tan legendaria como los rones que producía, entre los pocos que se han destilado y envejecido íntegramente en el Caribe.
Velier es uno de los mayores y más importantes actores del sector de la importación y distribución italiana. Se fundó en 1947 en Génova y se especializó inicialmente en la importación de licores. A continuación, el negocio se amplió a los vinos y, más tarde, comenzó la labor de selección de barriles de Whisky y Ron que luego se comercializaron con su propia marca.
Es Luca Gargano, que se incorporó a Velier en 1983, comprando una acción junto con su hermano Paolo, quien descubrió algunas de las últimas barricas producidas por Caroni. En octubre de 2004, Luca viajó al Caribe para visitar la sede de la histórica destilería en Trinidad. El panorama al que se enfrentó fue terrible: la empresa había caído en desuso y la refinería de azúcar con la destilería estatal adyacente habían sido cerradas. Al ver que se utilizaba un sistema de embotellado manual, muy artesanal, Luca preguntó si todavía tenían barricas en proceso de envejecimiento. Así que le condujeron a la puerta de un almacén que contenía cientos de barriles de ron, algunos de ellos de 1974, utilizados para cortar los rones más jóvenes.
Unos meses más tarde, algunas de esas barricas se enviaron a Italia para evaluar y analizar su calidad. Los rones eran excelentes y se decidió embotellarlos con toda su fuerza para mantener el equilibrio. Fue el comienzo de una nueva marca y de una línea de rones que conservan el aliento de una época que ya no existe. Son rones ricos en historia, aromas y olores que nunca más se producirán.
Así es como la antigua e histórica destilería Caroni, fundada en 1918 y que ya no funciona desde 1993, sigue viva hoy en día: en todas esas etiquetas que llevan el nombre de "Caroni", encontramos un trozo de historia, de lo que fue una destilería legendaria, tan legendaria como los rones que producía, entre los pocos que se han destilado y envejecido íntegramente en el Caribe.
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