Willi Opitz

Willi Opitz fue ingeniero mecánico hasta 1995, cuando decidió abandonar su carrera y dedicarse a la viticultura en Illmitz, un municipio de Burgenland, en el extremo oriental del país, justo en la frontera con Hungría.
Ya en 1996 fue nominado en Londres como "enólogo del año", siendo el primer austriaco en recibir este título, y recibió el Premio Estrella del Vino, Landessieger Burgenland. La bodega comenzó con ocho hectáreas de viñedos, rodeados de ocho pequeños lagos que, gracias a la humedad que aportan, favorecen el desarrollo de la botrytis cinerea.
Hoy cuenta con 17 hectáreas de viñedos propios, todos ellos gestionados según la filosofía biodinámica. Willi Opitz puede considerarse un innovador absoluto, ya que ha inventado su propio método de producción, por el que ha recibido numerosos premios internacionales. Opitz produce una amplia gama de vinos de postre únicos, los Schilfwein, similares a los Eiswein, que se elaboran secando las uvas para conseguir una mayor concentración de azúcar. Se producen unas 80.000 botellas, con excelentes vinos blancos y tintos. Uno de sus famosos Schilfwein es el "Opitz One", un vino tinto dulce elaborado con uvas "zweigelt" secas. Además de este tipo, Opitz también produce una amplia gama de Eiswein muy especiales elaborados con uvas tintas, como la pinot noir. Desde 2003, su hija Angela trabaja con Willi. Junto con su marido Iain Ashworth, ha trabajado en las cocinas de varios restaurantes con estrellas Michelin en Inglaterra y, al mismo tiempo, ha creado una empresa de catering, 'Criminally Good Food' Cia.
Para subrayar la extrema originalidad de Willy, publicó su CD "The Sounds of Wine", en el que grabó los sonidos de su bodega con los vinos en plena fermentación.