Château de Reignac

Situado en la cima de una colina de la denominación Entre-deux-Mers, el castillo de Reignac fue construido en el siglo XVI pero, a lo largo de los dos siglos transcurridos desde su construcción, el castillo ha sido modificado varias veces, sufriendo numerosas obras, especialmente en el patio interior que alberga los invernaderos diseñados por el famoso Gustave Eiffel. Un punto de inflexión importante para la finca se produjo en 1990, cuando Stephanie e Yves Vatelot compraron el château y al mismo tiempo iniciaron un importante proyecto de modernización de la finca. El primer paso fue trabajar con Michelle Roland, enóloga de renombre y experiencia mundial, gracias a la cual la finca empezó a cosechar una larguísima serie de éxitos, llevando el nombre de Reignac al Olimpo de Burdeos.
Desde su llegada a la finca, la familia Vatelot optó por abandonar inmediatamente la vendimia mecánica, sustituyéndola por la manual, y se renovaron las viñas aumentando la densidad a 6.000 cepas por hectárea. Con una superficie total de unas 135 hectáreas, 80 hectáreas están plantadas con vides, de las cuales dos hectáreas están dedicadas a uvas blancas, como Sauvignon Blanc y Semillon, mientras que las otras 78 se dividen entre un 75% de Merlot y un 25% de Cabernet Sauvignon. En suelos caracterizados por la grava y la arcilla, con pleno respeto por la naturaleza, el medio ambiente y el ecosistema, se cultivan y cosechan uvas ricas, francas y concentradas en todos sus matices organolépticos.
Racimos que se procesan y mejoran en la bodega sin desvirtuar nunca lo que la estación y la tierra pudieron expresar en la fruta. En la actualidad, el Château de Reignac produce cuatro etiquetas y, además del Grand Vin de Reignac, elabora un segundo vino tinto del mismo nombre (Château de Reignac), un blanco "de Reignac" y, desde 2002, también produce el Balthus, obtenido a partir de la transformación de uvas merlot puras cosechadas en las tres hectáreas de los viñedos más antiguos. En definitiva, cuatro vinos que expresan plenamente la belleza de la región de Burdeos y de la AOC Entre-deux-Mers.