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Tenuta di Angoris

La finca de Angoris puede presumir de una historia realmente única: se estableció ya en 1647, año en el que el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico Fernando III de Habsburgo donó una gran extensión de terreno cerca de la zona de Cormòns a Locatello Locatelli, barón de Eulenburg y Schönfeld, en reconocimiento a sus logros durante la sangrienta Guerra de los Treinta Años.
En la actualidad, la finca de Angoris se extiende por 630 hectáreas, de las cuales unas 130 se dedican al cultivo de la vid. Dirigida actualmente por Marta Locatelli, que ha tomado el relevo de su padre Luciano, la bodega es una de las históricas, no sólo de Friuli, sino de todo el país. Con sus prestigiosas parcelas de viñedo en las denominaciones Collio e Isonzo, los viñedos propios cultivan variedades típicas locales e internacionales como Pinot Grigio, Friulano, Verduzzo, Ribolla Gialla, Sauvignon Blanc, Schioppettino, Cabernet Sauvignon, Merlot, Refosco dal Peduncolo Rosso, Chardonnay, Pignolo y Picolit.
La gama de etiquetas de la finca Angoris es amplia -se producen trece vinos al año- y de excelente calidad, como demuestran los numerosos premios nacionales e internacionales recibidos, además de ser agradable en todos los matices organolépticos. Tanto entre las filas como en la bodega, las operaciones se llevan a cabo con el máximo cuidado, sin recurrir a atajos o compromisos que puedan ir en detrimento de la calidad; las decisiones operativas se confían a Alessandro Dal Zovo, enólogo de la finca con muchos años de experiencia.
Así, de un terruño en el que cada variedad de vid se encuentra con su hábitat natural, nacen los vinos friulanos, bien pensados y elaborados con mil atenciones, para que cada botella pueda expresar todo su potencial. Inmediato y directo si se trata de blancos, intenso y profundo si se trata de tintos, y en cualquier caso todo puntualmente tradicional, típico y valioso.