Riffault

El Domaine Sébastien Riffault es uno de los baluartes de la producción natural de Sancerre en toda la región. Los orígenes de la bodega se remontan a 1900 en Sury-en-Vaux, una pequeña comuna en la parte oriental del Valle del Loira, pero sólo en la década de 1950 pasó a manos de Etienne Riffault, padre de Sébastien. Pero luego, en 2002, Sébastien tomó las riendas de la bodega de Etienne Riffault, quien perfeccionó tanto las prácticas del viñedo como las de la bodega, sin olvidar nunca las tradiciones de la zona, sino más bien tratando de acentuar cada vez más la correspondencia entre el vino y el terruño. Sébastien trabaja 12 hectáreas de viñedos, todos ellos de unos 50 años, entre Verdigny, Sancerre y Sury-en-Vaux de forma extremadamente meticulosa.
El rey indiscutible de estos viñedos sólo puede ser el Sauvignon Blanc, la uva tradicional de toda la zona. Todas las parcelas, compuestas principalmente por suelos silíceos y calcáreos, se siguen labrando exclusivamente a caballo, para evitar la excesiva compactación del suelo y los daños al ecosistema, y se cultivan según la filosofía biodinámica. Los viñedos de Sébastien están plantados con una amplia gama de plantas, flores y hierbas que aumentan la biodiversidad y atraen a los insectos buenos. Las uvas se dejan en la vid cada año hasta que están completamente maduras, a menudo incluso afectadas por la botritis, y luego se fermentan en grandes barriles agotados utilizando las levaduras autóctonas de los hollejos.
Cada una de las botellas producidas por esta finca es una prolongación directa de los distintos terruños de los que proceden, algo que no se da por descontado en la zona de Sancerre, donde el Sauvignon Blanc se ve a menudo forzado a entrar en los cánones convencionales, encontrando poca libertad de expresión. Los vinos de Sébastien no son ciertamente vinos ordinarios, son auténticos, sinceros, producidos sin compromiso, una verdadera joya de esta zona de Francia.