La Fralluca

Fralluca fue fundada en 2005 en Suvereto, en la costa toscana, por Luca y Francesca. Tiene una historia que es toda una historia: "Nos conocimos y nos enamoramos en 1998, en Milán. Francesca era de Pisa y Luca de Milán, ambos licenciados en Economía y Comercio, y los dos trabajábamos en el mundo de la moda y la confección. Pronto descubrimos que teníamos nuestros sueños en común, el de una familia y el de producir vino en la Toscana, donde a Francesca le hubiera gustado volver. [...] Después de tres años de investigación a lo largo de la costa toscana, nos enamoramos de nuevo, de una colina en Suvereto, desde cuya cima, en una terraza de una granja abandonada, empezamos a fantasear con la primera copa de nuestro vino", y es de este amor de donde procede el nombre Fra+Luca. La realización del sueño de producir vino de calidad en lo que se conoce como la Maremma toscana se manifiesta en el respeto a los principios de la viticultura ecológica y natural. En las 10 hectáreas de viñedos, situados a unos 100 metros sobre el nivel del mar y protegidos por el matorral mediterráneo, se cultivan las variedades típicas de la región, como la Sangiovese y la Vermentino, así como bayas de más allá de los Alpes, como la Cabernet Franc, la Syrah y la Viognier. La filosofía de La Fralluca es la de la sostenibilidad y la preservación del medio ambiente circundante: este sentimiento también se desprende de la bodega construida en la ladera, para limitar el impacto visual y preservar la belleza del lugar. En la elaboración del vino, el objetivo es realzar y dejar que se exprese el carácter de las uvas, respetando tres principios fundamentales: limpieza, precisión y oportunidad. Las uvas se recogen siempre a mano, se colocan en pequeñas cajas y se llevan rápidamente bajo el toldo, donde se procesan inmediatamente. La vinificación se realiza por separado no sólo para cada tipo de uva, sino también para cada viñedo y cada clon. Los vinos de La Fralluca se distinguen por una notable adhesión territorial a través del lenguaje de la elegancia y la mineralidad.