Erasmo

La bodega Erasmo se encuentra en Chile, en los valles que en los últimos años han hecho famoso a este país entre los amantes del vino de todo el mundo. En realidad, la bodega se fundó sobre las cenizas de una antigua bodega, la "Reserva de Caliboro", gracias al conde Marone Cinzano, un nombre destacado en la producción de la DOCG de Brunello di Montalcino y propietario de la renombrada bodega Col d'Orcia, a quien le gusta llamarse a sí mismo "enólogo de dos mundos". En 2005, inició el renacimiento de Erasmo en Caliboro, en el valle del Maule, con un ambicioso proyecto que pretende devolver los símbolos de la cultura rural chilena, recuperando edificios ahora abandonados pero ricos en historia arquitectónica. Desde el comienzo de su aventura sudamericana, el Conde ha prestado atención a los conocimientos que le han transmitido los antiguos campesinos de la zona, confiando en sus consejos. Alta densidad en el viñedo, escaso riego -el terruño se mantiene fresco incluso en verano gracias a los vientos del sur- y un cuidado meticuloso de cada planta -entre las filas se cultivan cabernet sauvignon, cabernet franc, barbera, garnacha, alicante, mourvedre y merlot- son los dogmas que se siguen en el campo. La fase de envejecimiento difiere según la etiqueta final, y para algunos tipos se prevé la maduración en madera.
Hoy son ocho las marcas que toman forma entre las paredes de Erasmo, con la calidad y la innovación que siempre han distinguido el trabajo de los antepasados de Francesco Marone Cinzano, fusionadas con el potencial de la patria andina. Se trata, sin duda, de un buen proyecto que da lugar a botellas que hay que degustar para estar al día en el panorama vinícola internacional.