Bodega Santa Julia

La historia de la "Bodega Santa Julia" está hecha de fechas, comenzando en 1950, año en que la bodega fue fundada por José Alberto Zuccardi, con el objetivo de producir vinos de alta calidad mediante la práctica de una viticultura sostenible, con el máximo respeto por el medio ambiente, el ecosistema, la biodiversidad y la naturaleza. Tras fundar su empresa en la zona de Mendoza (Argentina), el propio Alberto Zuccardi, que había diseñado un moderno sistema de riego, plantó un viñedo en la región de Maipú en 1963, para demostrar a los agricultores la eficacia de su invento. Sin embargo, un par de décadas más tarde, la atención de Alberto volvió a la Bodega Santa Julia, que comenzó a ser gestionada con vistas a un crecimiento constante y continuo. Desde entonces, se ha iniciado un programa de plantación de variedades de uva no autóctonas argentinas, apareciendo en las filas de la finca cepas de caladoc, ancellotta, graciano, bourbulenc, aglianico, albariño y falanghina. Posteriormente, en 1997, se abrió la pequeña bodega experimental para la vinificación de pequeños lotes de uva, mientras que en 2001 se abrieron las puertas de la bodega a los visitantes externos. En 2003 se elaboró el primer vino espumoso con la etiqueta "Bodega Santa Julia", dando inicio a un proyecto que sigue vigente en la actualidad, y por último, en 2004 llegó la certificación ecológica, que da fe de un verdadero compromiso con el respeto y la sostenibilidad medioambiental. Año tras año, la Bodega Santa Julia se ha convertido en un emblema de singularidad y estilo, un ejemplo de cuánta excelencia vitivinícola se puede encontrar en las tierras de Mendoza. La bodega, fundada por Alberto Zuccari, cuida cada detalle, controlando escrupulosamente cada etapa de la producción, tanto en el viñedo como en la bodega, para ofrecer una gama de etiquetas que desde hace años conquista a los amantes y conocedores del vino en todo el mundo. Vinos simplemente excelentes.