Altemasi
La pasión y la tradición van de la mano de una alta vocación por el vino y el espumoso en particular, lo que identifica a las tierras del Trentino como unas de las zonas italianas más prestigiosas y reconocidas en lo que respecta a los vinos espumosos Metodo Classico.
Este es el escenario en el que se encuentra la bodega Altemasi, perteneciente a la famosa cooperativa Cavit de Trento, pero que en realidad se gestiona como si fuera una bodega independiente.
Todo comienza con el máximo respeto por la tierra, la naturaleza, la biodiversidad, el medio ambiente y el ecosistema, y continúa con la búsqueda constante y continua de la máxima calidad posible. Partiendo de la materia prima, escrupulosamente seleccionada, las siguientes fases de producción se orientan precisamente a potenciar la propia materia prima, sacando a relucir todos sus matices más característicos y sus rasgos más distintivos.
El eje de todas las actividades es la innovadora bodega, construida en 1993 y diseñada exclusivamente para producir vinos espumosos del Método Clásico y del Método Charmat. Una estructura única, extremadamente funcional y equipada con las más modernas e innovadoras tecnologías de vinificación. Distribuidas en cuatro niveles diferentes, cada una de las bodegas está dedicada a una etapa específica del proceso de elaboración de los espumosos. En el sótano, los vinos espumosos se dejan madurar, mientras que la fermentación, el remuage, el degüelle, el embotellado y el envasado tienen lugar en las otras plantas.
Una bodega que es, en esencia, la joya de la corona de la denominación de origen Trento DOC, tan extraordinaria como toda la gama de etiquetas Altemasi. Tanto si se elaboran con uvas chardonnay vinificadas puramente como si se combinan con uvas pinot noir, la excelencia de las burbujas Altemasi está siempre garantizada.
Empezando por el Brut, pasando por el Rosé, luego por el Millesimato y terminando por el Pas Dosé y el "Grail Reserve": cuando las botellas hacen referencia al nombre de Altemasi, puede estar seguro de que el más alto prestigio del Metodo Classico está servido en bandeja de plata.
